Esta casa refleja el carácter tradicional y rústico de la zona. Es una construcción de dos plantas de piedra ennoblecida, lo que le otorga una gran solidez y belleza. La fachada de la casa se presenta con una estética clásica, destacando la nobleza de la piedra que la cubre.
Al ingresar, te encuentras con una escalera de estuco que conecta las dos plantas, un detalle que resalta la elegancia de la vivienda. Las vigas interiores, de madera envejecida, aportan un toque cálido y rústico, complementado por los arreglos pétreos que adornan las paredes y las estructuras, mostrando el encanto de la piedra tradicional.
En la planta baja, la casa cuenta con un salón que dispone de una chimenea, lo que genera un ambiente acogedor. Las cuatro habitaciones y el salón en general requieren renovación, lo que ofrece la oportunidad de personalizar los espacios a tu gusto, manteniendo su esencia rústica. El estado de los canelones, con cinco años y medio de antigüedad, refleja que la casa ha sido cuidada, aunque algunas áreas necesitan actualización.
En la planta alta se encuentran tres dormitorios, uno de los cuales tiene un hermoso suelo de madera que aporta un aire cálido y sofisticado. Además, la puerta de entrada a la casa es nueva, lo que da una sensación de modernidad en contraste con la antigüedad y el estilo tradicional de la edificación.
El entorno de la casa está rodeado por la naturaleza pura de la región, lo que le da al pueblo un encanto especial. Los alrededores ofrecen tranquilidad y belleza natural, creando un ambiente perfecto para quienes buscan paz y contacto con el entorno rural.